Un importante desafío social que enfrenta el ecosistema de Ethereum es cómo equilibrar e integrar la Descentralización y la colaboración. La ventaja de este ecosistema radica en la multiplicidad de individuos y organizaciones diferentes, como los equipos de clientes, investigadores, equipos de Capa 2, desarrolladores de aplicaciones y organizaciones comunitarias locales, que están trabajando para lograr el futuro de Ethereum que ellos imaginan. El principal desafío es asegurar que todos estos proyectos puedan construir juntos un ecosistema de Ethereum que parezca unificado, en lugar de numerosos sistemas cerrados incompatibles entre sí.
Para hacer frente a este desafío, muchos participantes en el ecosistema han propuesto el concepto de "coordinación de Ethereum". Esto incluye la coordinación de valores (como mantener el código abierto, reducir la centralización, apoyar los productos públicos), la coordinación técnica (como seguir los estándares dentro del ecosistema) y la coordinación económica (como usar ETH como token tanto como sea posible). Sin embargo, este concepto ha sido históricamente impreciso en su definición y puede conllevar riesgos de control a nivel social: