La auto-reflexión es la mejor forma de sublimación. Date tiempo, no te apresures, ve paso a paso, día a día. Cree en la increíble resiliencia de la vida, colabora con tu corazón y no te abandones a ti mismo. Cuando tu capacidad aún no puede alcanzar tu objetivo, debes calmarte y forjarte, eliminar pensamientos dispersos, evitar aspiraciones desmedidas y no rendirte fácilmente. La calma que parece natural proviene de una preparación profunda y acumulativa. Encuentra una ubicación precisa, trabaja en ti mismo con seriedad y poco a poco podrás volverte sereno, encontrando tranquilidad en medio del bullicio. Ojalá encuentres paz, continúes explorando hacia adentro y seas un acumulador consciente, sedimentando y sublimando a ti mismo.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
La auto-reflexión es la mejor forma de sublimación. Date tiempo, no te apresures, ve paso a paso, día a día. Cree en la increíble resiliencia de la vida, colabora con tu corazón y no te abandones a ti mismo. Cuando tu capacidad aún no puede alcanzar tu objetivo, debes calmarte y forjarte, eliminar pensamientos dispersos, evitar aspiraciones desmedidas y no rendirte fácilmente. La calma que parece natural proviene de una preparación profunda y acumulativa. Encuentra una ubicación precisa, trabaja en ti mismo con seriedad y poco a poco podrás volverte sereno, encontrando tranquilidad en medio del bullicio. Ojalá encuentres paz, continúes explorando hacia adentro y seas un acumulador consciente, sedimentando y sublimando a ti mismo.