El mercado no se preocupa de si crees o no, sigue su curso.
Muchas personas al hacer un pedido piensan así: "He visto análisis, he investigado la lógica, este pedido debe ser correcto" ¿Pero el mercado te escuchará? No. No sube porque analices más, ni baja porque no te esfuerces lo suficiente.
El mercado solo se preocupa por la fuerza de ambas partes en la compra y venta, cómo cambia la estructura y hacia dónde fluye el dinero. No tiene nada que ver con si me crees o no.
No deberías considerarte un profeta, deberías ser un observador. Observar la reacción del mercado, observar las intenciones de los fondos, observar los cambios en la estructura. No se trata de que no tengas una postura, sino de que dejes ir la obsesión de "tengo que tener razón".
Los que pueden sobrevivir nunca son los más inteligentes, sino que son las personas que están más dispuestas a reconocer sus errores y a ajustarse de inmediato.
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El mercado no se preocupa de si crees o no, sigue su curso.
Muchas personas al hacer un pedido piensan así:
"He visto análisis, he investigado la lógica, este pedido debe ser correcto"
¿Pero el mercado te escuchará? No.
No sube porque analices más, ni baja porque no te esfuerces lo suficiente.
El mercado solo se preocupa por la fuerza de ambas partes en la compra y venta, cómo cambia la estructura y hacia dónde fluye el dinero.
No tiene nada que ver con si me crees o no.
No deberías considerarte un profeta, deberías ser un observador.
Observar la reacción del mercado, observar las intenciones de los fondos, observar los cambios en la estructura.
No se trata de que no tengas una postura, sino de que dejes ir la obsesión de "tengo que tener razón".
Los que pueden sobrevivir nunca son los más inteligentes,
sino que son las personas que están más dispuestas a reconocer sus errores y a ajustarse de inmediato.